Loading...

Charlas y colaboraciones

carla not

Nutrición en Pacientes con MPN

Neoplasias Mieloproliferativas

¿Qué son las MPN?


Las Neoplasias Mieloproliferativas (MPN, por sus siglas en inglés) son un grupo de enfermedades de la médula ósea en las que se produce un exceso de células sanguíneas. Se consideran enfermedades raras y crónicas, y las principales incluyen:

  • Policitemia Vera (PV): Exceso de glóbulos rojos, lo que aumenta el riesgo de coágulos.
  • Trombocitemia Esencial (TE): Producción anormalmente alta de plaquetas.
  • Mielofibrosis Primaria (MF): Formación de tejido cicatricial en la médula ósea, lo que reduce la producción de células sanguíneas normales.


Los síntomas pueden variar según el tipo de MPN, pero incluyen fatiga, dolor óseo, sudoración nocturna, picazón en la piel y mayor riesgo de trombosis o sangrados.


Consejos Nutricionales para Pacientes con MPN

Una alimentación adecuada puede ayudar a mejorar la calidad de vida y controlar síntomas en personas con MPN. Aquí algunos consejos clave:


1. Mantener una alimentación antiinflamatoria

Las MPN pueden causar inflamación crónica, por lo que se recomienda:
  • Aumentar el consumo de frutas y verduras ricas en antioxidantes (arándanos, espinacas, zanahorias, brócoli).
  • Incorporar grasas saludables (aguacate, frutos secos, aceite de oliva).
  • Consumir pescado azul (salmón, sardinas) por su alto contenido en omega-3.
  • Evitar ultraprocesados, embutidos y alimentos con grasas trans.


2. Controlar el hierro en la dieta (en caso de Policitemia Vera)

Dado que la PV implica un exceso de glóbulos rojos, a algunos pacientes se les recomienda moderar el consumo de alimentos ricos en hierro:
  • Reducir la carne roja y vísceras.
  • Priorizar proteínas magras como pollo, pavo o pescado.
  • Evitar suplementos de hierro sin supervisión médica.


3. Mantener una buena hidratación

Es clave para evitar la deshidratación y reducir la viscosidad de la sangre:
  • Beber al menos 2 litros de agua al día (según indicación médica).
  • Incluir infusiones y caldos sin sal añadida.
  • Evitar el exceso de alcohol y bebidas azucaradas.


4. Cuidar la circulación y evitar el estreñimiento

La actividad física y una alimentación rica en fibra ayudan a mejorar la circulación y la digestión:
  • Consumir fibra de fuentes como legumbres, cereales integrales y semillas de chía o lino.
  • Realizar actividad física moderada según tolerancia (caminatas, yoga).
  • Evitar el sedentarismo y el consumo excesivo de sal.


5. Consultar siempre con un profesional

Cada paciente con MPN es diferente y debe recibir una dieta personalizada según su diagnóstico y tratamiento.


Clica aquí para ver el vídeo


DN Carla Not

Utilizamos cookies propias y de terceros para ofrecer y mejorar nuestros servicios y recoger información estadística. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su instalación y uso en los términos de nuestra Política de cookies